domingo, 17 de julio de 2011

Saber quien soy yo...


Y se levanto esa mañana con un sentimiento extraño, algo raro le oprimía el pecho, lo incomodaba tanto que no noto que era tarde para ir a trabajar. No era nada nueva esa sensación, cada tanto aparecía de sorpresa en su vida, o mejor dicho, en sus rutinas, pero esta ves él creyó que ya no estaría asechado por ella y se desconcertó aun más… ¿Cómo podía ser posible?

Sabia que lo iba a reflexionar por la noche, como siempre lo hizo, meditar antes de dormir para tratar de conciliar el sueño en paz, quizás por ello trato de hacer que ese día especial fuese único e inolvidable. Antes de llamarla a su celular, paso por la florería donde semanas atrás había visto una ramo de orquídeas blancas que le gustaron, no existe nada mas puro y noble que un ramo de ellas: por eso las escogió. Compro las flores y al percibir su agradable olor recordó que aun tenía que arreglar esa preocupación.

Sonaron cuatro tonos antes de que conteste, entonces acordaron verse en el restaurant que se conocieron, a ese al que llamaron “destino”, ella sonrió y le dijo que lo amaba, el contesto “yo también te quiero mucho”.

Todo estaba listo, solo faltaban unos minutos para salir a su encuentro, se sentó en la cama mirando sus zapatos negros y volvió a asegurarse en el pensamiento que todas las cosas que planeo salieran bien. En ese momento sintió el vacio de nuevo, levanto la mirada, respiro hondo y aun así no pudo evitarlo, lloro como hace tiempo no lo hacia. Cada lágrima que caía por su rostro, cada lagrima que se estrellaba en la alfombra, cada una de ellas era el escape de lo que trato de ignorar, estaba ahí, tan claro como confuso, victoriosamente se apoderaba de él y de su verdad. Recordó entonces, esa frase que resalto en su libro de lectura “Antes de conocer a alguien, asegúrate de conocerte a ti mismo”, como una flecha que da en el blanco, de esa misma manera, entendió que estaba equivocado, que esa sensación aun lo poseía. Ese aniversario a celebrar era la más cruel mentira, quedando él como único responsable, pensó en ella y le envió un mensaje de texto… luego se pregunto: “¿Quién soy yo de verdad?”.

NOTA: Luego de leer la historia que escribí, prueben escuchar el tema de Susan Boyle "Proud" y vean que sucede. Clic aquí: http://taringamp3.com/10-proud-susan-boyle/

Elías

sábado, 9 de julio de 2011

Autopsia


No pienso morirme de amor.
Pero estoy convencido de que
si me abren el cuerpo ahora mismo
descubrirán algún órgano
que no tenía antes
y que ahora tanto me duele.

Igual no es nuevo para la ciencia
pero lo es para mí:
algo que el cuerpo ha producido
sólo desde que te conocí,
desde que sigo esperando alguna respuesta
tuya.

Lawrence Schimel